LA ALTA SENSIBILIDAD. EXPERIENCIAS VITALES.

La vida ha tocado, a dos de mis mejores Valientes Soldados del Ejercito de La Alta Sensibilidad.

Son de esas situaciones, como ser altamente sensibles, que no podemos elegir ni cambiar.

Requieren un trabajo personal de aceptación y un proceso de asumir, de la manera más positiva posible, el regalo/prueba con la que la vida nos ha querido poner a pruebas.

LAS BATALLAS MÁS DIFÍCILES LES TOCAN A LOS MEJORES SOLDADOS, debemos ver la enfermedad como una oportunidad, tal y como mi querido Ibán Bermúdez cuenta en su bello libro.

Para ustedes dos, mis queridas participantes del taller de los abrazos, tengo reservado un ejemplar de su libro «Cuando Abracé la Vida», dedicado por él y también por mí.

No espero vuestra asistencia y comprenderé que las nuevas circunstancias a las que se enfrentan les impidan asistir, pero encontraremos la manera de entregarles mi regalo y además darles una muestra del taller de los abrazos, inclusive pueden ir los abrazos hasta donde ustedes dos estén.

A mí en su día me ayudo mucho el libro de Jorge Bucay «Camino de lágrimas». Todo cambio en nuestra vida, una simple mudanza, un cambio de trabajo, una enfermedad, etc. requiere una ayuda para transitar ese camino de la forma más saludable posible y por supuesto acompañadas de aquello que necesiten.

No es momento de usar vuestra empatía con los demás, POR FAVOR, es momento de pedir. PIDAN LO QUE NECESITAN, los demás sabrán decirles si pueden o no.

Es momento de centrarse en vosotras y lo que les ocurre de la forma más saludable posible, desde el respeto y la aceptación de todos/as los que a día de hoy formamos parte de vuestras vidas.

ESTOY AQUÍ, NO DUDEN EN PEDIRME AYUDA. LAS QUIERO. SÉ QUE PUEDEN Y CUANDO LO DUDEN, YO SE LOS RECORDARÉ.